La Ética del cristiano
Creemos que los hijos de Dios son responsables de su conducta antes sí mismos, ante el prójimo y ante Dios.
La ética es el estudio de la moral, la virtud, el deber, la felicidad y el buen vivir; lo mejor es que todos y cada uno de estos elementos nos los procura Dios; una vez que nos ha justificado de nuestro pecado, nos provee elementos para vivir feliz (paz y gozo como frutos del espíritu Ef 5.22), por lo cual y como hemos visto somos responsables de nuestra forma en como nos dirigimos o comportamos, incluyendo el testimonio que se da de esta conducta, Ro 2.15, ante la gente en cuanto al trato 1Sa 2.25, y como es lógico también delante de Dios 2Ti 4.1, 1Co 6.10.
Creemos que los hijos de Dios, en su conducta se guían por los siguientes principios:
a) Su objetivo existencial es la glorificación de Dios Is 43.7, Sal 89.1, Sal 103. 1-5
b) Su responsabilidad es amar a Dios y al prójimo Dt 6.5, Lv 19.18, Mt 22.34-40
c) Su norma de vida es el decálogo, además de las leyes morales contenidas en las escrituras, desde el antiguo testamento. Ex 20.1.17, Lv 11; 18, Hch 15.20 y 29
Creemos que los hijos de Dios viven imitando al Señor Jesucristo.
Nuestra guía de conducta es Jesucristo mismo, no nos llevara a ningún lado el seguir a hombres; pero el imitar a nuestro Señor Jesucristo es lo que nos dará vida eterna, y el camino que ha recorrido nuestro Señor es muy largo, es por eso que ponemos nuestras fuerzas físicas, mentales, emocionales, a disposición del Señor, ya que seguir sus pisadas requiere de mucha atención, si nos amoldamos a la forma del Señor tendremos la vida eterna, 1Pe 2.21, 1Co 11.1, Ef 5.1, 1Ts 1.6, 3Jn 11. Hemos visto a Dios, el encuentro que tuvimos con Dios y con nuestro Señor es determinante para querer ser como Él.
Por lo tanto, como seguidores de Jesucristo no somos participantes de: Lujuria de la carne, lujuria de los ojos, soberbia de la vida; nos abstenemos de fornicaciones (adulterios, homosexualidad, prostitución, afeminación, perversiones o aberraciones sexuales), actos que lastimen nuestro cuerpo, pleitos, celos, herejías, hechicerías, alcoholismo, tabaquismos, drogadicción y fármaco dependencia, pornografía, palabra torpes, juegos de azar, modas inmorales, guerras…Mt 6.22; Lc 6.45, Ef 4.29, St 3.2, 9-11, 4.11, 1Jn 2.16, Ga 5.19-21, Lv 19.28.
Y al igual que Jesucristo promovemos valores positivos como son: La familia, la sociedad sana, la superación cultural, las virtudes, el trabajo, los derechos humanos, la paz, la amistad, el carácter... 1Ti 5.4, 2Pe 1.5, 2Ts 3.12, Mt 5.9, Gn 4.26, Ex 12.3-4, Jo 24.15, Lv 19.19, Jn 14.27, Ro 5.1, 12.18, 14.19, Ec 5.12, Pr 6.6, Gn 2.4-6, 1Ti 5.13, Pr 28.19
Estos son sólo algunos ejemplos de como es que seguimos la vida de nuestro Salvador y Señor Jesucristo.
No hay comentarios:
Publicar un comentario